Decenas de personas resultaron intoxicadas en la bahía Quintero-Puchuncaví, en pleno litoral central chileno, debido a los altos niveles de dióxido de azufre emanados desde el campo industrial ubicado en la zona, lo que obligó a las autoridades a suspender las clases secundarias durante dos días para resguardar la salud de la población.
El episodio, que afectó a unos 50 estudiantes y 25 funcionarios educativos de la comuna durante la jornada de ayer, llevó a la propia ministra de Medioambiente, Maisa Rojas, a encabezar reuniones de emergencia con diversas autoridades. Luego, informó que se tomarán medidas provisionales para la reducción de emisiones de la fundición de cobre de Codelco, ubicada cerca de la bahía, y la empresa termoeléctricas Ventanas, de AES Andes.
“Nos estamos haciendo cargo, esta mañana lideré una reunión de emergencia con varios ministerios y Codelco. Allí, la Superintendencia de Medioambiente informó que ordenó medidas provisionales para la reducción de emisiones de las empresas de manera inmediata», afirmó Rojas.
Agregó que están «aplicando un enfoque preventivo para que las comunidades de Quintero y Puchuncaví tengan un mejor invierno. Este tema me preocupa y me ocuparé de él personalmente».
“Moralmente, no es posible que sigamos exponiendo a esta población a este nivel de riesgo para la salud (…) Necesitamos establecer medidas de corto plazo para hacer frente a este invierno», puntualizó la ministra.
EFE