El primer ministro palestino, Mohamed Shtayeh, consideró este viernes 5 de febrero, que la decisión de la Corte Penal Internacional (CPI) que reconoce Palestina como Estado Parte del tribunal es «una victoria para la Justicia y la humanidad», al abrir la posibilidad de investigar a Israel por presuntos crímenes de guerra.
Según el dirigente palestino, la decisión es «un mensaje para los perpetradores de crímenes» y transmite el mensaje de que sus acciones «no estarán prescritas» ni «quedarán impunes».
Para Shtayeh, la decisión también es «un triunfo para el mismo tribunal, que frustró los intentos de Israel de politizar sus deliberaciones», recogió la agencia oficial de noticias Wafa.
Además, aseguró que la Autoridad Nacional Palestina (ANP) «seguirá documentando los crímenes israelíes», sobre todo los «asesinatos, demoliciones de casas, confiscaciones de tierras y expansión de asentamientos» en los territorios palestinos ocupados, «que violan el derecho internacional» y la solución de dos Estados.
El primer ministro pidió a su vez a la CPI que «acelere sus procedimientos judiciales en los expedientes que se le presentan», lo que incluye la expansión colonial y las tres operaciones militares a gran escala que Israel libró en Gaza en 2009, 2012 y 2014.
El primer ministro, Benjamín Netanyahu, reaccionó tachando al tribunal internacional de «organismo político» que perpetra «una persecución legal» contra Israel, que no es miembro de la Corte ni acepta su legitimidad.
Una sala de cuestiones preliminares de la CPI dictaminó este viernes, por dos votos a uno, que Palestina abarca los territorios bajo ocupación israelí desde 1967, lo que incluye Jerusalén Este, Cisjordania y la Franja de Gaza.
La decisión es una respuesta a una solicitud hecha por la fiscal general, Fatou Bensouda, que a finales de 2019 sugirió la posibilidad de abrir pesquisas a Israel y al movimiento islamista Hamás, que gobierna de facto en Gaza, por posibles crímenes de guerra.
Esta pidió a la sala que concretara «los territorios en los cuales pueden llevarse a cabo la investigación» dadas «las controvertidas cuestiones legales y fácticas» que se desprenden del caso.
En su momento, Bensouda consideró que existe una base razonable para comenzar una investigación, por lo que ahora depende de ella solicitarla formalmente a los jueces.
Palestina, por su condición de Estado observador de la ONU, ratificó en enero de 2015 el Estatuto de Roma, la carta fundacional de la CPI, abriendo la puerta a que la Fiscalía de la CPI emprendiera una investigación.
La ANP solicitó formalmente la apertura de pesquisas en 2018, lo que faculta a Bensouda a comenzar a investigar sin la necesidad de pedir autorización a los jueces, como ocurre normalmente en la CPI.
También espera que esta investigue la reacción de Israel a las protestas de las llamadas Marchas del Retorno de 2018 , que dejaron un saldo de más de 273 palestinos muertos y más de 16.000 heridos.
Asimismo, cabe la posibilidad de que miembros de grupos armados palestinos sean investigados por la CPI, pues en informes públicos de la oficina de Bensouda se menciona el lanzamiento de cohetes desde Gaza hacia territorio israelí.
EFE