El surrealismo, en el ámbito del arte en piel es sinónimo de libertad para el venezolano Aldo Moreno, cuando de diseñar y tatuar se trata.
El venezolano parte de la realidad y hace una interpretación creativa totalmente libre, de manera que la autenticidad prevalece en cada una de sus obras. Pero no solo se trata de innovar en el dibujo, sino también representa un reto: «es un nivel que requiere de mucha precisión y cuidado mínimo en los detalles», asegura el artista.
«Por lo general, hago el diseño adaptándolo al movimiento del cuerpo o a la zona donde voy a tatuar (para mí es importante que un tatuaje tenga buena fluidez con el cuerpo), luego hago el esténcil con el iPad, lo paso a Photoshop y allí aplico un filtro para obtener más detalles. Eso me da más precisión, a la hora de realizar mi trabajo. También uso, la mayoría de las veces, agujas pequeñas para controlar la saturación y no maltratar la piel», agrega Moreno.
Aldo ha viajado a múltiples países de Europa donde su arte ha sido premiado en convenciones internacionales.