Hasta 100 millones de empleos turísticos podrían perderse en todo el mundo por la pandemia, lo que conllevaría una reducción del PIB mundial de hasta el 2,8 %, según advierte Naciones Unidas, que urge a intensificar la cooperación internacional en lo relativo a restricciones de viajes y gestión de fronteras.
En el informe «El turismo y la covid-19» presentado este martes, la entidad advierte de las consecuencias a corto y largo plazo de que los gobiernos adopten decisiones unilaterales, incluido el posible impacto negativo en los esfuerzos de recuperación más amplios y en la confianza de los consumidores en el turismo internacional.
El documento, elaborado por la Organización Mundial del Turismo (OMT), una de las agencias especializadas de las Naciones Unidas, señala que, a medida que los países eliminan gradualmente las restricciones de viaje y el sector se reinicia lentamente en muchas partes del mundo, la salud debe seguir siendo una prioridad.
Por ello, se deben establecer unos protocolos coordinados que protegen a trabajadores, comunidades y viajeros, al tiempo que apoyen a empresas y empleados.
En un mensaje transmitido con motivo de la publicación del informe, el secretario general de las Naciones Unidas, António Guterres, ha recordado que el turismo es uno de los sectores económicos más importantes del mundo que emplea a una de cada diez personas y proporciona sustento a cientos de millones más, además de impulsar las economías y permitir que los países prosperen.
Se prevé que las corrientes mundiales de inversión extranjera directa (IED) disminuirán hasta un 40 % en 2020 y que los países desarrollados también se verán perjudicados.
IMPACTO SIN PRECEDENTES E INÉDITO
Las llegadas de turistas internacionales que alcanzaron los 1.500 millones en 2019 (alrededor de otros 9.000 millones de personas viajaron dentro de sus países) podrían bajar este año entre el 58 % y el 78 %.
Lo que pone en riesgo hasta 100 millones de empleos directos en el turismo, y el gasto turístico podría disminuir entre 910.000 millones de dólares y 1,2 billones, lo que reduciría el producto interior bruto (PIB) mundial entre un 1,5 % y un 2,8 %.
Las pequeñas empresas (que soportan el 80 % del turismo mundial) son particularmente vulnerables.
Las mujeres y la población joven (entre 15 y 24 años), los grupos con mayor representación en el sector, con un 54 % y un 21%, respectivamente, además de los trabajadores de la economía informal son los que corren mayor riesgo.
EFE