El Hospital Vall d’Hebron de Barcelona, al noreste de España, presentó este viernes su tratamiento para trastornos de salud mental en niños y adolescentes a través de una terapia asistida con perros, unos animales que les ayudan a relacionarse y regular emociones durante su ingreso.
El 70 % de los cuarenta pacientes que ya se han beneficiado desde su puesta en marcha estaban ingresados por conductas de autolesiones o suicidas, mientras que el resto sufría trastornos del espectro autista o de la conducta alimentaria, entre otros.
"Terapeutas" de cuatro patas
Cuando es día de terapia con perros, la expectación crece en la planta de Psiquiatría del hospital por la visita de los "terapeutas" de cuatro patas, siempre asistidos y acompañados por enfermeras humanas, que dirigen las actividades con perros que complementan al resto del tratamiento y dada la evidencia científica de los beneficios que trae consigo.
Así lo han explicado en rueda de prensa tanto el responsable de hospitalización del servicio de psiquiatría de Vall d'Hebrón, Marc Ferrer, como la psicóloga que coordina el proyecto, Bárbara Citoler, y la responsable académica del mismo, de la Cátedra de Animales y Sociedad de la Universidad española Rey Juan Carlos, Nuria Máximo.
Ferrer ha llamado la atención sobre los datos de la Organización Mundial de la Salud (OMS) que señalan que uno de cada siete jóvenes de entre 10 y 19 años padece algún trastorno mental y que en los últimos dos años han visto en el centro "una tendencia creciente" a las conductas autolesivas y las tentativas de suicidio".
"Cada trastorno tiene sus particularidades: unos presentan dificultades para controlar impulsos y otros para comunicarse, pero todos tienen en común una desregulación emocional. Y eso es lo que trabajamos en terapia asistida con perros", ha añadido.
Romper el primer bloqueo con el paciente
La psicóloga ha señalado que para los adolescentes que perciben como más amenazante el entorno frío hospitalario y la interacción con personas desconocidas, la terapia con los perros permite "romper el primer bloqueo con el paciente".
Máximo ha destacado igualmente el hecho de que los pacientes ingresados estén ya esperando con ilusión el día de la terapia con perros, como un aliciente en su ingreso.
"Es tener ilusión por el futuro en un persona que han ingresado por no querer un futuro", ha apuntado la responsable del proyecto de terapias asistidas con perros, que también llevan a cabo otros centros sanitarios de España.
El responsable de los perros de terapia, David Ordóñez, de la entidad Perruneando, ha puesto en valor el entrenamiento tanto de los canes como de las guías para que la terapia tenga sentido.
Por ahora, los cinco perros que participan en este proyecto, que cuenta con el respaldo económico de la fundación Dingo Natura, son dos golden retriever —India y Musa— y tres jack russell —Odette, Opala y Xata—.
EFE / Noticias Venevision