Dolutegravir es una pastilla para tratar la infección por VIH capaz de controlar los síntomas del sida y que tiene grandes ventajas para los pacientes pediátricos porque se disuelve en agua y tiene sabor a fresa, por lo que los niños con la enfermedad lo tienen más fácil para seguir el tratamiento. El fármaco, además, es barato y no necesita conservarse en frío. Por todo ello la Organización Mundial de la Salud lo ha escogido como primera opción de tratamiento para los bebés y niños con sidaa partir de las cuatro semanas de vida.
Un estudio liderado por el Instituto de Investigación del Hospital Universitario 12 de Octubre i+12 ha demostrado que estas pastillas solubles y con sabor a fresa son seguras y más eficaces para tratar la infección por VIH en los niños con un peso inferior a los 20 kilos que las terapias conocidas hasta ahora.
Los resultados de la investigación, que se han publicado en Lancet HIV, han confirmado que esta opción terapéutica contribuirá a controlar el sida en los niños gracias a estar basada en un medicamento con un sabor agradable y fácil de tomar y cuyo precio es asequible, lo que facilitará su distribución, sobre todo en algunos países africanos en los que la incidencia del sida es muy elevada en la población infantil.