Portugal empezó la semana con una ligera caída de la incidencia de coronavirus a 14 días, que pasó de los 319,9 casos por 100.000 habitantes del viernes a 314,5 este lunes, aunque se produjo un aumento en el número de hospitalizados.
Según el boletín más reciente de la Dirección General de Salud (DGS), en los hospitales hay 768 personas con el virus, 24 más que el día anterior y de las cuales 154 están en cuidados intensivos.
Las autoridades notificaron además 11 muertes y 1.135 contagios, una cifra baja como suele ocurrir los lunes debido al efecto del fin de semana, cuando se realizan y procesan menos test, aunque es ligeramente superior a la del lunes anterior (1.094).
Portugal, con 10 millones de habitantes, suma desde que empezó la pandemia 1.004.470 casos confirmados y 17.573 fallecimientos.
Al contrario que la incidencia, el índice Rt, que mide el número de personas a las que contagia un infectado, siguió al alza y está en 0,96, aunque se mantiene por debajo del 1, el nivel recomendado por las autoridades.
Este fin de semana se empezó a vacunar a los menores de edad, con los jóvenes de 16 y 17 años, un proceso que ha comenzado con éxito ya que recibieron la primera dosis unas 155.000 personas, el 80 % de la población total con esas edades que podía ser vacunada.
El dato fue facilitado hoy por el equipo responsable por la vacunación en Portugal, que consideró que la cifra muestra una «gran afluencia».
Los dos próximos fines de semana está programada la vacunación de los adolescentes de entre 12 y 15 años.
Las autoridades pretenden completar el proceso de vacunación de estos menores hasta el 19 de septiembre, y así comenzar el curso escolar con la inmunización lo más avanzada posible.
El 64 % de la población portuguesa tiene la pauta completa y el 75 % ha recibido al menos la primera dosis.
EFE