El efecto del alcohol en el cuerpo puede tener consecuencias al día siguiente, una de ellas es la conocida “resaca”, termino acuñado a la bajada brusca de alcohol en la sangre a la mañana siguiente y que, afortunadamente, se puede combatir con el espárrago .
Y es que el consumo de alcohol causa un aumento de la diéresis y de la sudoración, así como del ritmo cardíaco, pérdida de memoria y dificultad de concentración en las actividades habituales.
Según una publicación en el Journal of Food Science, los aminoácidos y minerales que contienen el extracto de espárragos, sobre todo de las hojas, alivia la resaca y protege al hígado de las toxinas generadas por el consumo de alcohol.
Es conocido que acelera la metabolización del etanos y minimiza el estrés oxidativo al que se somete nuestro organismo tras una ingesta abundante de alcohol.
Al ser tan versátil a nivel culinario, este alimento rico también en vitaminas hidrosolubles del grupo B, puede consumirse en ensaladas, revoltillos o hasta salteadas, todo surgió de la creatividad del chef.