El Servicio Meteorológico Nacional (SMN) de México advirtió este martes que se prevé que la tormenta tropical Lorena, que se formó esta mañana en el Pacífico, se intensifique a huracán categoría 1 en las próximas horas y toque tierra el fin de semana en costas del estado de Baja California Sur.
El coordinador general del SMN, Fabián Vázquez Romaña, explicó en una conferencia de prensa que se espera que Lorena evolucione a ciclón categoría 1 en las próximas 36 horas, aunque también existe la posibilidad de que llegue a la categoría 2.
Advirtió que a partir del miércoles se instalará un temporal de lluvias, que dejará precipitaciones torrenciales e intensas en los estados de Baja California Sur, Baja California, Sonora, Sinaloa y Chihuahua.
Puntualizó que se espera que el ciclón toque tierra en las primeras horas del sábado, o "ligeramente antes", en la costa occidental de Baja California Sur, y después, es posible que avance hacia Sonora.
Por ello, exhortó a la población a estar atenta de los avisos meteorológicos que se emitirán periódicamente.
Asimismo, avisó que al ser un "sistema muy extenso en materia nubosa y de precipitación”, se mantiene la alerta por precipitaciones a lo largo de toda la semana en los estados mencionados.
“Es un sistema longevo que va a estar prácticamente toda la semana afectando Baja California, y finalmente, durante el fin de semana hacia el noroeste de México, sobre la región de Sonora”, remarcó.
Detalló que la suma de lluvia que se prevé entre martes y sábado es equivalente al 300 % de lo que llueve en un mes en Baja California Sur, y un 140 % en Sonora.
“Es decir, tres veces la lluvia de septiembre” en Baja California Sur, y 1,4 veces, en Sonora, precisó.
Puntualizó que el pronóstico de lluvias intensas durante toda la semana se extiende a Nayarit, Sinaloa, Durango, Sinaloa y Chihuahua, además de que se prevén lluvias muy fuertes en el centro del país.
Ante estas condiciones, pidió extremar precauciones en las regiones de impacto del fenómeno que podrían ocasionar inundaciones repentinas, deslaves y erosión del terreno.
EFE