El tercer álbum de estudio de la estadounidense Billie Eilish, el esperado 'Hit me hard and soft', es un trabajo elegante que representa, a lo largo de diez canciones, un paso más en su estilo urbano contemporáneo y, a la vez, heredero de las grandes intérpretes femeninas del siglo XX.
De nuevo producido con su hermano Finneas O'Connell, el nuevo disco de Billie Eilish (Los Ángeles, 2001) vuelve sobre el camino abierto por su predecesor, 'Happier than ever' (2021), en el que se planteaba su vida como joven estrella del pop. Tres años después, la imagen que Eilish proyecta sobre el mundo sigue siendo un tema recurrente en sus canciones.
"¿Estoy actuando ya según mi edad?", se pregunta en el primer corte del álbum, 'Skinny', una canción sobre la percepción que los demás tienen sobre su imagen de cara al público, sobre la depresión y cómo lidiar con la fama mundial, algo con lo que la artista convive desde su precoz inicio en la música.
Información de EFE