Tres técnicas de Terapia Cognitiva Conductual para una mejor salud mental

De acuerdo a la Asociación Estadounidense de Psicología, los conceptos básicos de la Terapia Cognitiva Conductual (TCC) incluyen que los problemas psicológicos se basan en parte en formas de pensar inútiles, en patrones de comportamiento aprendidos y también que quienes viven con estos problemas pueden mejorar con mecanismos de afrontamiento y manejo para ayudar a mitigar sus síntomas.

Diversas afecciones de salud mental como la depresión, la esquizofrenia, el trastorno bipolar o el trastorno de ansiedad, por ejemplo, pueden ser ayudadas mediante las TCC.

Según el problema con el que esté lidiando y sus objetivos, hay varias maneras de abordar la TCC. Cualquiera que sea el enfoque que adopte su terapeuta, incluirá el identificar problemas o cuestiones específicas en su vida diaria, tomar conciencia de los patrones de pensamiento improductivos y cómo pueden afectar su vida, identificar el pensamiento negativo y remodelarlo de una manera que cambie cómo te sientes y aprender nuevos comportamientos y ponerlos en práctica.

Tres de las técnicas usadas frecuentemente en la TCC son:

1- Encuadre: Quizás tiendes a generalizar en exceso, supones que sucederá lo peor o le das demasiada importancia a los detalles menores. Pensar de esta manera puede afectar lo que haces e incluso puede convertirse en una profecía autocumplida.

Su terapeuta le preguntará sobre su proceso de pensamiento en ciertas situaciones para que pueda identificar patrones negativos. Una vez que esté consciente de ellos, puede aprender a reformular esos pensamientos para que sean más positivos y productivos.

2- Terapia de exposición:

La terapia de exposición puede usarse para confrontar miedos y fobias. El terapeuta lo expondrá lentamente a las cosas que le provocan miedo o ansiedad, mientras le brinda orientación sobre cómo enfrentarlas en el momento.

Esto se puede hacer en pequeños incrementos. Eventualmente, la exposición puede hacerte sentir menos vulnerable y más confiado en tus habilidades de afrontamiento.

3- Aproximación sucesiva:

Esto implica tomar tareas que parecen abrumadoras y dividirlas en pasos más pequeños y alcanzables. Cada paso sucesivo se basa en los pasos anteriores para que gane confianza a medida que avanza, poco a poco.

Noticiero Venevisión / HealthL