Un estudio encabezado por investigadores estadounidenses presentó una nueva plataforma de vacunación intranasal con la que se pueden administrar proteínas inmunizantes mediante la superficie de las mucosas y poder crear anticuerpos para el VIH y el Covid-19.
Aunque de momento la investigación se ha limitado por la poca absorción de la vacuna a través de los revestimientos de la mucosa, la nueva tecnología da un “enfoque prometedor” para administrar vacunas por la nariz, de acuerdo a lo reseñado por la revista Science Translational Medicine.
Encabezado por Brittany Hartwell, del Instituto Tecnológico de Massachusetts (MIT), el equipo investigador usó proteínas amph, que consisten en proteínas virales conjugadas con un extremo soluble en agua que permite la unión a la albúmina.
La albúmina es una proteína de la sangre que atraviesa la mucosa al interactuar con el receptor neonatal para el FC, que la transporta bidireccionalmente a través del epitelio de la mucosa, lo que la hace idónea como mediadora de la administración de vacunas.
La amph puede formularse con la proteína Env gp120, que está en el envoltorio externo del VIH, o con la proteína del dominio de unión al receptor (RBD) del SARS-Cov2, que es la que se une a las células humanas.
Very excited to share that our new article is out this week in @ScienceTM -- & is featured on the cover! A fitting cap to #ICMI2022!https://t.co/UPvClGF2sB
— Brittany Hartwell, PhD (@Britt_Hartwell) July 21, 2022
This work from my postdoc in the IrvineLab @kochinstitute @MIT introduces an intranasal mucosal vaccine strategy that (1/) https://t.co/ZtCva5zXbh
Induce altas concentraciones de anticuerpos de inmunoglobulina G (IgG) e IgA en diversos tejidos de la mucosa cuando es administrada por vía intranasal a ratones y monos.
“Estos resultados podrían ser un buen presagio de la posibilidad de una vacuna para prevenir la infección por VIH y tienen el potencial de contribuir al objetivo de una vacuna contra el SARS-CoV-2 independientemente de la variante”, indicó el experto de la Universidad de California, Francis Szoka, en un texto adjunto que ahonda en las implicaciones clínicas del estudio.
Noticiero Venevisión / 20minutos