Las autoridades italianas publicaron hoy un concurso público para la adquisición de cien millones de jeringuillas y agujas con las que aplicar la futura vacuna contra el coronavirus, adquirida y repartida por la Comisión Europea (CE).
El comisario italiano para la emergencia de la pandemia, Domenico Arcuri, ha lanzado esta licitación mediante la cual las empresas podrán presentar en los próximos quince días su oferta para vender al Estado cien millones de jeringuillas.
Posteriormente se procederá a la selección de la compañía que se haga con la licitación.
Además Arcuri ha solicitado la compra de cinco millones de viales de solución salina necesarias para la aplicación de algunos tipos de vacuna contra la COVID-19.
Por el momento Italia ha ya desembolsado su cuota de 94 millones de euros para la compra por parte de la Comisión Europea de las varias candidatas a vacunas contra el patógeno, según relató ayer Arcuri en una comparecencia parlamentaria.
Por ahora se sabe que Bruselas ha firmado contratos con Pfizer y BionTech (EEUU/Alemania), Sanofi-GSK (Francia/Reino Unido), Curevac (Alemania) AstraZeneca y la Universidad de Oxford (EE.UU/Reino Unido) Johnson & Johnson (EE.UU) y Moderna (EE.UU).
Italia tendrá derecho al 13,5 % de las vacunas compradas a nivel comunitario, detalló el comisario.
Entretanto, el Gobierno italiano está preparando un plan nacional para garantizar la seguridad y distribución de la futura vacuna, aunque va con retraso ya que muchas regiones aún no han indicado las instalaciones en las que conservarían la vacuna.
Arcuri ha referido que la idea es disponer de un centro de suministro por cada 20.000 ciudadanos.
La subsecretaria del Ministerio de Sanidad, Sandra Zampa, cree que las primeras dosis llegarán pronto pero ha llamado a no «hacerse ilusiones» pues solo estarán disponibles en cantidades sustanciales a partir de la próxima primavera, previsiblemente.
EFE