La depilación láser ha evolucionado mucho en los últimos años. Al principio era un proceso lento y doloroso que a menudo provocaba quemaduras en la piel y solo funcionaba parcialmente en combinaciones de piel y pelo muy particulares. Por eso, no era recomendable en verano y había que tener especial cuidado entre sesiones.
Hoy en día, existe una tecnología súper innovadora y es el láser de triple onda. Es la última generación que se ha convertido en una revolución, porque ha conseguido mezclar la tecnología de los tres láseres principales para depilación (Alejandrita, Diodo y ND-YAG) en un solo pulso, es decir, en una sola máquina.
Esta tecnología aplica los tres láseres en un solo disparo, lo que implica que es capaz de actuar en todo tipo de pelo en muchas menos sesiones: desde los más claros y finos hasta los más gruesos y resistentes. Además, funciona en todo tipo de fototipos, tanto en las pieles más claras como en las más oscuras.
“La depilación láser de triple onda se ha convertido en el tratamiento más seguro, menos doloroso, más rápido y efectivo del mercado actual”, asegura la Dra Cristina Premerl, médico estético especialista en medicina fotónica.
Los tres láseres que utiliza este tratamiento son:
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