El ayuno intermitente es un tipo de dieta en la que se reducen las comidas diarias, logrando que el organismo esté unas 12 o 16 horas sin ingerir alimentos. Un nuevo estudio realizado por el Imperial College London (Reino Unido) ha desvelado que este tipo de alimentación podría ayudar a restaurar el daño nervioso sin necesidad de cirugía, lo que supone un gran avance en la medicina.
En la investigación, que se ha publicado recientemente en la revista Nature, se observó cómo la restricción de comidas provocaba que las bacterias intestinales aumentaran la producción del ácido 3-indolpropiónico (IPA), un metabolito necesario para restaurar las fibras nerviosas conocidas como axones.
Las pruebas del estudio se realizaron en ratones en los que se aplastó el nervio ciático, la mitad de ellos fue sometido a un ayuno intermitente –en el que había días que comían todo lo que querían y otros en los que se les restringía completamente–, y la otra mitad comían libremente sin límites. El tiempo que duró este tipo de dietas fueron 10 o 30 días antes de la operación, y la recuperación de los roedores fue controlada de 24 a 72 horas después de seccionar el nervio.
Una nueva posible terapia para los daños nerviosos
“Actualmente no existe un tratamiento para las personas con daño nervioso más allá de la reconstrucción quirúrgica, que solo es eficaz en un pequeño porcentaje de casos, lo que nos lleva a investigar si los cambios en el estilo de vida podrían ayudar a la recuperación”, ha expuesto Simone Di Giovanni, una de las autoras del estudio.
Y es que, sus hallazgos han mostrado que la longitud de los axones regenerados fue hasta un 50% mayor en los ratones que estuvieron en ayuno intermitente y los niveles de metabolitos específicos, incluido IPA, eran también mucho más altos. Además, encontraron que la bacteria que produce IPA, la esporogénesis de Clostridium, está de forma natural en el intestino y en la sangre humana y en los ratones solo en los intestinos.
Los investigadores quieren seguir más allá y empezarán a analizar el papel de la terapia con metabolitos bacterianos. Además, quieren conocer si ampliar la administración de IPA a lo largo del día, puesto que ésta dura de unas cuatro a seis horas en la sangre a altas concentraciones, podría ayudar a aumentar su efecto terapéutico.
Con información de WebConsultas