El papa Francisco pidió a la comunidad internacional comprometerse con el cese de la guerra en Ucrania tras la invasión de Rusia, que calificó de “repugnante” y una “masacre insensata”.
“No se detiene la violenta agresión contra Ucrania, una masacre insensata donde cada día se repiten atrocidades y no hay justificación para esto. Suplico a los actores de la comunidad internacional para que se comprometan para que cese esta guerra repugnante”, señaló.
El pontífice lamentó que de nuevo esta semana se han lanzado “misiles y bombas contra ancianos, niños, madres, mujeres embarazadas”, recordando que visitó el hospital Bambino Gesu donde se encuentran algunos niños ucranianos ingresados víctimas de los bombardeos.
También quiso recordar a los millones de refugiados que huyen de las bombas y que han perdido todo, y expresó “su dolor” por los que no pueden escapar.
“Ancianos, niños, personas frágiles se quedan a morir bajo las bombas sin recibir ayuda y sin la seguridad, ni siquiera de un refugio antiaéreo”, explicó Francisco, que se refirió a los bombardeos como “algo inhumano y sacrílego, porque va contra la sacralidad de la vida humana”.
El pontífice mencionó a los sacerdotes que en estos días se encuentran cerca de la población ucraniana y les agradeció su apoyo a “toda esta gente desesperada”.
El papa también instó a “no acostumbrarse a la violencia y a la guerra” y tampoco “a acoger con generosidad” como se está haciendo hasta ahora, porque se corre el peligro “que en las próximas semanas o meses nos acostumbremos y olvidemos”.
Asimismo, Francisco pidió atención para todas las mujeres y niños que huyen para que no caigan en manos “de los buitres de la sociedad”, haciendo referencia a la trata de personas.
Con información de Noticiero Venevisión / EFE