El primero de dos vuelos con migrantes hondureños deportados de EE.UU. en aviones militares llegó este viernes a La Lima, norte de Honduras, y fue recibido por autoridades del Gobierno que preside Xiomara Castro.
En el primer avión militar, venían al menos 78 migrantes, dijo en la víspera a los periodistas el canciller hondureño, Eduardo Enrique Reina, quien encabezó la comitiva oficial de recibimiento de los migrantes, mientras que en el segundo llegarán 48.
El primer avión se estacionó al final de la pista, frente a la Base Aérea Armando Escalón, y el acceso a la prensa fue restringido.
Según Reina, este viernes llegarán 352 migrantes hondureños en los cuatro vuelos programados, dos ellos civiles.
Antes del arribo de la aeronave castrense al Aeropuerto Internacional José Ramón Villeda Morales, de La Lima, departamento de Cortés, eran esperadas otras dos, civiles, en las que llegarían más de un centenar en cada una, indicó Reina.
Agregó que los deportados en aviones civiles son parte de las últimas deportaciones de la Administración de Joe Biden, mientras que los enviados en aeronaves militares son de los capturados en Texas y otros puntos fronterizos, en cumplimiento a las nuevas medidas del presidente estadounidense, Donald Trump, que están siendo aplicadas no solamente a Honduras.
El alto funcionario reiteró que, bajo el programa social de emergencia ´Hermano, hermana, vuelve a casa´, a los nacionales deportados se les dará 100 dólares, un bono para la adquisición de alimentos y luego otros 1.000 dólares para que pueden emprender alguna actividad económica que les permita generar algún ingreso.
Indicó, además, que el Gobierno hondureño también está buscando acciones conjuntas, como mecanismos de inversión, con el sector privado para hacer frente a las deportaciones de migrantes de Estados Unidos.
Reina resaltó que las remesas que envían los migrantes hondureños en el exterior, alrededor de 1,8 millones, en su mayoría en Estados Unidos, que en 2024 rozaron los 10.000 millones de dólares, no solo benefician a sus familias, sino también a pequeños negocios.
EFE