Israel lanzó en lo que va de jueves un total de 115 ataques aéreos que causaron la muerte de al menos 60 personas en diferentes puntos del sur y el este del Líbano, pero también contra los barrios del sur de Beirut conocidos como el Dahye, uno de los principales bastiones del grupo chií libanés Hizbulá.
El ministro de Medioambiente y coordinador del Plan Nacional de Emergencia del Líbano, Nasser Yassin, dijo en un informe que "hoy se registraron alrededor de 115 ataques en varias zonas del Líbano, lo que provocó 60 mártires y 81 heridos", según un recuento de datos del Ministerio de Salud Pública del país mediterráneo.
Estos bombardeos, que desde que Israel inició su campaña de ataques el lunes se concentran en el sur y el este del Líbano, han forzado el desplazamiento de decenas de miles de personas, entre ellas al menos 77.100, que se han registrado en los centros de acogida habilitados por el Gobierno en los últimos días.
Ante estos movimientos, las autoridades libanesas han ampliado a 565 el número de instalaciones públicas (principalmente escuelas e institutos) destinadas a recibir a los desplazados, de acuerdo con el ministro.
"También hay un gran número de desplazados que se han trasladado a otras casas en diferentes zonas, se están quedando con familiares o están en casas de alquiler, hoteles u otros lugares públicos o privados", añadió.
Por otra parte, Yassin indicó que en los últimos días las autoridades han registrado "el cruce de 15.600 ciudadanos sirios y otros 16.130 ciudadanos libaneses hacia territorio sirio", mientras que indicó que "miles han viajado por aire" a otros países, por lo que "el número real" de desplazados "sea probablemente mucho mayor".
La campaña de ataques de Israel ha dejado desde el lunes alrededor de 700 muertos, un número de víctimas sin precedentes desde la guerra civil libanesa (1975-1990), lo que ha provocado un aumento de los llamados de la comunidad internacional para lograr un alto el fuego.
EFE