El hierro es un nutriente indispensable para la salud. Es necesario para la formación de la hemoglobina, que ayuda a llevar oxígeno a las diferentes partes de nuestro cuerpo. Cuando nuestro organismo carece del hierro suficiente para cubrir sus necesidades podemos sentir cansancio, falta de aire, entre otros.
Una carencia común
La falta de hierro es un problema frecuente y puede ocurrir con anemia o sin ella. De acuerdo con la Organización Mundial de la Salud (OMS), es el trastorno nutricional más común y extendido de todo el planeta.
Signos de alerta
Desde la Fundación Española del Corazón (FEC) han lanzado la campaña ‘Que no se ponga Feo’ para recordar la importancia de controlar los niveles de hierro en sangre y dar a conocer los síntomas del déficit de este micronutriente.
Las principales señales de alerta son:
“Algunos de estos síntomas pueden confundirse con otros problemas de salud, por lo que una persona puede tener ferropenia (falta de hierro) y no saberlo”, remarca la Dra. Almudena Castro, portavoz de la FEC y cardióloga del Hospital Universitario La Paz de Madrid.
Una falta de hierro leve normalmente no causa problemas, pero si no se trata, la anemia puede llevar a problemas del corazón (latidos irregulares o acelerados), problemas en el embarazo (partos prematuros o bebés con poco peso), retraso en el crecimiento o mayor vulnerabilidad frente a las infecciones.
Desde la FEC recuerdan que “para conocer los niveles de hierro y de glóbulos rojos basta con hacer un simple análisis de sangre”.
Importancia en la insuficiencia cardiaca
Si bien la falta de hierro es algo que se debe controlar y solucionar en cualquier persona, es especialmente importante en aquellas que tienen insuficiencia cardíaca.
“Los pacientes con insuficiencia cardiaca tienen un problema de absorción en el intestino. Debido a la congestión de agua que acumulan, no absorben el hierro como deberían”, señala la Dra. Castro.
De acuerdo con la FEC, tener insuficiencia cardiaca y déficit de hierro produce un aumento del 42% del riesgo de muerte, reduce un 19% la calidad de vida y un disminuye un 13% la capacidad de ejercicio.
Es por ello que en las personas con insuficiencia cardíaca “se hacen analíticas de rutina por su cardiólogo cuando van a sus revisiones, cada tres o cada seis meses, dependiendo de cada paciente”, explica la Dra. Castro
“Reducir el déficit de hierro puede asociarse a una mejora sostenida de la capacidad de ejercicio y de calidad de vida, así como a una reducción de las hospitalizaciones por empeoramiento de la insuficiencia cardiaca”, asegura.
Alimentos ricos en hierro
La alimentación está directamente ligada a nuestros niveles de hierro. En general, se considera que en los adultos lacantidad diaria recomendada es de entre 8 y 18 mg, según la edad, el sexo y la etapa vital.
Existen alimentos que tienen un alto contenido en hierro, micronutriente que puede ser tanto de origen animal como vegetal.
Entre los alimentos ricos en hierro de origen vegetal encontramos:
Hay que tener en cuenta que el hierro de origen vegetal se absorbe peor que el de origen animal. Sin embargo, tal y como señalan desde la FEC “los alimentos ricos en vitamina C, como el zumo de naranja o ciertas verduras, aumentan la absorción”.
Con información de CuerpoMente