Los no vacunados no podrán acceder desde este lunes al interior de los restaurantes, cines, teatros, museos, gimnasios y edificios públicos en Grecia., donde se implementa, además, la caducidad para el certificado de vacunación de los mayores de 60 años que no se hayan puesto la dosis de refuerzo transcurridos siete meses de la segunda.
Toda la población sin vacunar y sin haber pasado el covid-19, a excepción de los menores entre 4 y 17 años, tendrá además prohibido el acceso a estadios deportivos, exhibiciones y congresos.
Desde hoy pues la prueba negativa solo será aceptada para acceder a las iglesias, centros educativos, lugares de trabajo, peluquerías, tiendas no esenciales y las terrazas de restaurante o cafeterías.
Los únicos sitios en los que no se realiza ningún control sobre el estado de vacunación son las tiendas de alimentación y mercados, las farmacias y el transporte público urbano, dónde solo el uso de mascarilla es obligatorio.
Desde que se han ido endureciendo las medidas restrictivas para las personas no vacunadas, el interés por la vacuna se ha disparado y según informó hoy el ministro de Gobierno Digital, Kyriakos Pierrakakis, en los últimos 30 días se han concertado 444.000 citadas para la primera dosis, y 1,2 millones para la tercera, la de refuerzo.
Pese a todo, apenas un 61% de los 10,7 millones de habitantes del país han completado la segunda dosis de la vacuna, y un 8,3 % ya se ha inoculado la tercera.
La presidenta de la Asociación de Médicos de Hospitales de Atenas y El Pireo (EINAP) y miembro del comité de expertos que asesora al Gobino, Matina Pagonis, pidió que se impongan restricciones también para el acceso a los supermercados, como presentar una prueba rápida o usar doble mascarilla.
La situación epidemiológica en Grecia empeora con las últimas cifras de muertes y hospitalizaciones, que ante las medidas tomadas por otros países como Austria, que decretó el confinamiento general, se abre al debate sobre la toma de medidas más estrictas.
Pese a la situación crítica en los hospitales, con 76 muertes por covid-19 sólo el domingo, el ministro de Sanidad griego, Thanos Plevris, defendió que el sistema de salud pública está fortalecido y preparado para cumplir con las expectativas.
En declaraciones a la televisión ANT1, Plevris reafirmó hoy que «el Gobierno no quiere ni pretende imponer la vacunación obligatoria» y aseguró que no va a haber ningún cierre generalizado para la población.
EFE