Una sustancia presente en abetos siberianos tiene fuertes propiedades hepatoprotectoras, siendo capaz de proteger y restaurar las células del hígado de los efectos adversos de la intoxicación por alcohol, según han revelado científicos rusos. Se trata de los terpenos, una amplia clase de metabolitos secundarios.
En el cuerpo humano sirven de enlace en la síntesis de colesterol, las hormonas sexuales, las hormonas esteroides, las enzimas, es decir, todos los elementos necesarios para una vida sana.
Los terpenos se encuentran no solo en abetos siberianos, sino en diversas hierbas, flores, árboles, frutas y hortalizas. De hecho, desde hace miles de años se emplean en la prevención y el tratamiento de diversas enfermedades. Sin embargo, esta es la primera vez que los científicos destapan las propiedades hepatoprotectoras de esas sustancias. Sus efectos en el hígado se descubrieron en un experimento realizado con ratones por un grupo de especialistas del Instituto Arbuzov de Química Orgánica del Centro Científico de Kazán de la Academia de Ciencias de Rusia en colaboración con expertos de la compañía InitiumPharm.
A lo largo de un mes, los científicos dieron a los roedores soluciones de etanol y preparaciones que contenían terpenos. Descubrieron que bajo la influencia de los terpenos, se normalizaron los parámetros bioquímicos de la sangre, disminuyó la gravedad del daño a las células hepáticas y el coeficiente de masa del hígado. «El daño hepático alcohólico es solo uno de los modelos de efectos adversos. Nuestros estudios muestran una perspectiva de usar terpenos para proteger el hígado de cualquier efecto tóxico, por ejemplo, debido a trastornos alimentarios, quimioterapia, uso prolongado de drogas o exposición a virus», Liudmila Lacerus de InitiumPharm.