Los opioides son un grupo de medicamentos analgésicos cuya función es interactuar con los receptores de opioides de las células. Por lo general están hechos de amapola real o se sintetizan en un laboratorio, explican desde la Clínica Mayo.
Estos expertos señalan que este tipo de medicamentos, recetados por un médico, sirven para controlar de manera segura el dolor, generalmente el que aparece tras una cirugía.
Sin embargo, un estudio reciente que se llevó a cabo por el Centro de Salud de la Universidad McGill (RI-MUHC, por sus siglas en inglés), ha concluido que la prescripción de analgésicos opioides después del alta tras la cirugía no reduce el dolor postoperatorio y aumenta el riesgo de eventos adversos.
Los expertos que han llevado a cabo el estudio han recalcado que, a día de hoy, existen diferentes riesgos asociados en tomar opioides tras una cirugía y, además, no existen evidencias que respalden sus beneficios.
Con estos datos, el equipo del RI-MUHC se propuso llevar a cabo un estudio para estimar el impacto del uso de opioides en comparación con un tratamiento analgésico sin opioides tras una cirugía.
Los resultados, que se publican en la revista The Lancet, indican que la prescripción de opioides para controlar el dolor posoperatorio después del alta no solo es innecesaria, sino que además es perjudicial en muchos entornos quirúrgicos.
Por tanto, los hallazgos tienen el objetivo de “llenar un vacío crítico en el conocimiento sobre cómo se debe manejar el dolor en el hogar tras una cirugía”.
Por qué no deberían recetarse opioides tras una cirugía
Para llevar a cabo el estudio, los investigadores combinaron los resultados de 47 ensayos clínicos aleatorios en los que compararon la analgesia con opioides versus sin opioides en pacientes dados de alta después de someterse a un procedimiento quirúrgico.
De todos ellos, 30 ensayos incluyeron procedimientos menores, generalmente dentales, y 17 fueron procedimientos de extensión moderada, como cirugía ortopédica y general.
Tal y como explica Julio Fiore científico del Programa de Lesiones, Reparación y Recuperación del RI-MUHC e investigador principal del estudio, descubrieron “que la prescripción de opioides no tuvo impacto en el dolor posoperatorio informado por el paciente en comparación con los analgésicos simples de venta libre, pero aumentó significativamente el riesgo de eventos adversos, como náuseas, vómitos, estreñimiento, mareos y somnolencia".
De este modo, el experto asegura que prescribir analgésicos libres de opioides prevendría estos efectos adversos y mejoraría la experiencia de recuperación de los pacientes.
Por otro lado, los analgésicos sin opioides también ayudarían “a mitigar la crisis de los opioides al reducir el riesgo de uso indebido, adicción y desvío de opioides posoperatorios".
¿Cuáles son los efectos secundarios de utilizar opioides?
Los investigadores del estudio explican que los fármacos opioides se utilizan para aliviar el dolor en muchas áreas del sistema nervioso. Sin embargo, estos medicamentos también tienen otros efectos como la euforia y la sedación.
Entre los opioides más recetados por los cirujanos se encuentran la oxicodona, la hidromorfona, el tramadol y la codeína, que tienen un potencial adictivo.
“Es urgente mitigar la prescripción excesiva de opiáceos posoperatorios al mismo tiempo que se asegura un manejo adecuado del dolor para los pacientes", asegura Julio Fiore, quien asegura que “las muertes por sobredosis de opioides se han disparado en los últimos 20 años”.
Por su parte Charbel El-Kefraoui, coautor del estudio e investigador en prácticas en el RI-MUHC, asegura que estos hallazgos hacen necesario el uso de alternativas a los opioides para aliviar el dolor en el hogar tras una cirugía.
Con información de Vidae