El jugo de naranja forma parte de millones de desayunos diarios. Además un alimento muy saludable, especialmente si tomamos jugo natural recién exprimido, puesto que estará libre de azúcares y conservantes.
El jugo de naranja nos aporta muchos nutrientes. El principal es la vitamina C, necesaria para el crecimiento y desarrollo normales y con propiedades antioxidantes, antidepresivas y antiarrugas. Además, la vitamina C nos ayuda a prevenir enfermedades como la arteriosclerosis y a reducir el colesterol.
Incorporar un jugo de naranja a nuestro organismo al despertar es una de las cosas más positivas que podemos hacer cada día.
Al beber un vaso en ayunas podemos aumentar la secreción de bilis, lo que facilita que la vesícula biliar se vacíe. Esto nos ayuda a prevenir la acidez, la pesadez, la gastritis o las úlceras.
Es ideal para evitar el estreñimiento. Al ser lo primero que bebemos, eliminamos los desechos acumulados y podemos en marcha los intestinos, de manera que mejora nuestro flujo intestinal y nos hace ser mucho más regulares.
Como este proceso también ayuda a activar el metabolismo, purifica nuestro organismo y nos ayuda a ser más regulares, beber un zumo de naranja en ayunas también es una buena manera de controlar nuestro peso.
Relacionado con esto, como el jugo de naranja también contribuye a la hemoglobinización de la sangre, va muy bien para aliviar la anemia.
Información: Mundo Deportivo / Noticiero vv