Si te gusta la idea de reducir tu consumo de carne pero tienes una buena relación con el pescado, la dieta pescetariana puede ser para ti. Las personas que siguen esta dieta comen una amplia variedad de alimentos de origen vegetal, como frutas, verduras, legumbres, granos integrales y nueces, además de pescado y mariscos.
¿Qué significa ser pescetariana?
Las personas que siguen este tipo de alimentación, por lo general, comen de todo excepto carne. En su dieta, los pescetarianos pueden incluir lácteos y huevos, depende de cada uno. Algunos los mantienen en su menú semanal, mientras que otros optan por no hacerlo. Eso sí, lo que queda totalmente fuera de la mesa son las carnes rojas, las aves, el cerdo o el pavo. Es decir: cualquier mamífero.
La dieta pescetariana podría sonar similar a la dieta mediterránea popular, pero hay una gran diferencia: la carne roja está permitida (con moderación) en la dieta mediterránea, mientras que en la pescetariana, no. Por lo demás ambas guardan bastante similitud, ya que los mariscos, los productos frescos y las proteínas vegetales son los pilares de ambos planes de alimentación.
Beneficios de la dieta pescetariana
Es probable que te estés preguntando: ¿merece la pena ser pescetariana? Y la respuesta es clara: sí. "A menos que no puedas vivir sin un filete, hay muchos motivos por los que amar la dieta pescetariana: recoges los nutrientes de una dieta basada en vegetales, así como los del pescado y el marisco", afirma Emily Kyle, dietista y nutricionista.
Los pescetarianos obtienen, fundamentalmente, los mismos productos ricos en antioxidantes y vitaminas que consumen los vegetarianos, así como algunos nutrientes (proteínas completas y ácidos grasos Omega-3) de los mariscos que son más difíciles de asimilar en una dieta estrictamente vegetal.
"Por ejemplo, mientras que muchos vegetarianos y veganos pueden tener déficit de vitamina B12 (nutriente que se encuentra principalmente en las proteínas animales), los "pescetarianos son capaces de satisfacer sus necesidades diarias de B12 con una sola ración de la mayoría de las variedades de pescado", asegura Georgia Rounder, dietista y nutricionista.
"Esta dieta también se ha asociado con la disminución del riesgo de otras enfermedades crónicas, incluyendo diabetes, demencia y depresión", añade Rounder, "gracias al aumento de los omega-3 que se obtienen cuando el pescado es la principal fuente de proteína.
Otras personas, por supuesto, lo eligen por razones de sostenibilidad, preocupaciones por los derechos de los animales, o simplemente por preferencia personal, sostiene Kyle.
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