Para los médicos y el personal de salud del estado Mérida la pandemia ha sido una situación compleja que ha puesto a prueba su carácter profesional, pero también su temple humano, personal y afectivo ante la partida física de colegas y seres queridos.
Indira Briceño, directora del Hospital Universitario de los Andes, asegura que el impacto más fuerte de esta enfermedad para el sector se expresa en la cantidad de trabajadores, médicos, radiólogos y enfermeras que han perdido la batalla contra el covid-19.
«El reto fue y ha sido bastante grande porque en primera instancia no teníamos ni siquiera insumos para proteger a nuestro personal de primera línea(…) Luego el ministerio comenzó a dotar al hospital, así como las diferentes fundaciones aliadas», explicó Briceño.
Por otra parte, Nadia Ramírez, directora de gestión y control del referido centro asistencial, afirma que el acompañamiento de los pacientes positivos y los protocolos de despedidas de los fallecidos es otro de los temas más difíciles que les tocado afrontar a los afectados.
«Se han venido estableciendo algunos cambios donde se está permitiendo el ingreso de familiares a las áreas de aislamiento. Pero una vez que el paciente fallece el protocolo de manejo es bien estricto», aseveró Ramírez.
De acuerdo a cifras de la organización Médicos Unidos de Venezuela, hasta la fecha el estado Mérida contabiliza 27 decesos de personas que laboraban dentro del sector salud, 16 de estas eran médicos, mientras que más de 118 han muerto en toda la entidad.
Con información de Unión Radio