El presidente de Túnez, Kaïes Said, prorrogó este miércoles por un mes más el estado de emergencia, impuesto en el país desde noviembre de 2015 tras el atentado yihadista que segó la vida de doce miembros de la Guardia Presidencial en la capital.
A su llegada al poder a finales de 2019, Said reconoció que esta medida era «anticonstitucional» y se comprometió a limitarla exclusivamente a la lucha contra el terrorismo.
La última vez que se decretó fue el pasado mes de mayo por un periodo de seis meses en el marco de la crisis sanitaria del coronavirus, cuyo balance oficial asciende a 90.000 casos positivos y 2.935 decesos.
Esta iniciativa otorga poderes excepcionales a las fuerzas de seguridad, permitiendo, entre otras cosas, limitar el movimiento de la población, prohibir manifestaciones o huelgas susceptibles de derivar en desórdenes sin aprobación judicial previa.
EFE