Los líderes de la Unión Europea dieron hoy su respaldo a la llamada “Brújula Estratégica”, el nuevo plan de defensa para los próximos diez años que pretende situar a la UE como un proveedor de seguridad más autónomo para sus ciudadanos y también más allá de sus frontera.
Durante la cumbre celebrada en Bruselas, los Veintisiete mantuvieron un debate estratégico sobre seguridad y defensa, “teniendo en cuenta la nueva situación de seguridad en Europa” a raíz de la invasión rusa de Ucrania que, según reconocieron en unas conclusiones, “supone un cambio importante en su entorno estratégico.
Respaldaron en ese contexto la Brújula Estratégica, documento elaborado por el alto representante comunitario para Asuntos Exteriores, Josep Borrell, y aprobado el pasado día 21 por los ministros de Exteriores y Defensa de la Unión.
“Proporciona la orientación estratégica para la próxima década y define un conjunto coherente de acciones, medios y objetivos claros necesarios para este nuevo impulso”, subrayaron,
Los jefes de Estado y de Gobierno de la Unión destacaron que permitirá que la UE “actúe con mayor rapidez y decisión a la hora de enfrentarse a las crisis”, asegurando sus intereses y protegiendo a los ciudadanos al reforzar su capacidad para anticipar y mitigar las amenazas.
Además, estimulará la inversión y la innovación para que los Estados miembros desarrollen conjuntamente las capacidades y tecnologías necesarias, y propone profundizar en la cooperación con socios internacionales para alcanzar objetivos comunes.
Los líderes esperan ahora el análisis que la Comisión Europea tiene previsto desarrollar a mediados de mayo, en coordinación con la Agencia Europea de Defensa, sobre las carencias en materia de inversión en defensa y las propuestas de cualquier otra iniciativa necesaria para reforzar la base industrial y tecnológica de la defensa europea.
“Ello contribuirá a los esfuerzos por reforzar la resistencia de la Unión Europea y aumentar su capacidad de seguridad y defensa mediante más y mejores inversiones, centrándose en las carencias estratégicas identificadas”, consideraron.
Según dijeron, para el refuerzo de las capacidades de defensa de la UE y de sus Estados miembros, “debería aprovecharse todo el potencial de los instrumentos e iniciativas de financiación de la Unión Europea”, en particular el Fondo Europeo de Defensa y la cooperación estructurada permanente, el plan de desarrollo de Capacidades y la revisión anual coordinada de la defensa.
Los líderes europeos dijeron asimismo que deberían tomarse medidas antes de finales de 2022 para promover y facilitar el acceso a la financiación privada de la industria de la defensa, aprovechando también al máximo las posibilidades que ofrece el Banco Europeo de Inversiones.
El Consejo Europeo evaluará periódicamente la aplicación de la Brújula Estratégica y los avances en el ámbito de la seguridad y la defensa, y en caso necesario, proporcionará nuevas orientaciones.
EFE