El Gobierno de Japón levantará el veto a la entrada de viajeros –no turistas– procedentes de China, Corea del Sur, Australia y otros seis países a partir del 1 de noviembre, dijeron hoy fuentes del Gobierno.
Los otros países sobre los que Japón dejará de imponer la prohibición total de entrada serán Nueva Zelanda, Brunéi, Taiwán, Singapur, Tailandia y Vietnam, según recoge la agencia local Kyodo.
Japón, no obstante, mantendrá por los momentos suspendidos los acuerdos de exención de visados con estos países, lo que supone que los turistas no podrán entrar. Solo lo harán las personas con visados de negocios o casos particulares autorizados por las autoridades niponas.
El Ejecutivo nipón ha decidido flexibilizar las restricciones para los viajeros procedentes de los países donde se considera controlada la pandemia en una reunión del panel que preside el primer ministro nipón, Yoshihide Suga.
En cambio, se mantendrá el veto total sobre la entrada de viajeros procedentes de 152 países, una lista a la que se han sumado recientemente Myamnar y Jordania.
Asimismo, el Gobierno de Japón ha decidido retirar desde el próximo domingo la cuarentena que hasta ahora era obligatoria para todos los residentes extranjeros que viajaran al exterior y regresaran a territorio nipón, así como para quienes hicieran viajes de negocios de corta duración.
Hasta ahora, los residentes foráneos o los nacionales que viajaran al exterior por motivos de negocios y regresaran a Japón debían cumplir un periodo de aislamiento de dos semanas, además de someterse a un test de covid-19 antes de tomar el vuelo hacia su país y a su llegada a éste.
Como condición para eximirles de la cuarentena, las autoridades niponas exigirán a los viajeros restringir sus desplazamientos al extranjero a menos de siete días y tomar precauciones adicionales al regresar a Japón, como no utilizar el transporte público durante dos semanas.
EFE