La mesa directiva del Congreso de Perú pidió este jueves que se realice una investigación «rápida, independiente y transparente» de la muerte del ciudadano Eduardo Ruiz, de 32 años, durante la multitudinaria protesta que se realizó este miércoles en Lima en contra de las autoridades por la crisis de corrupción e inseguridad ciudadana que afronta el país.
«Lamentamos profundamente el fallecimiento del ciudadano Eduardo Ruiz Sáenz, el mismo que debe ser investigado y esclarecido, tanto sus circunstancias como el móvil», señaló un comunicado publicado en las redes sociales del Congreso.
La manifestación del miércoles en Lima, que tuvo réplicas en otras ciudades, fue una de la más grande de los últimos años en el país, y se convocó para rechazar al Gobierno y el Congreso, cuya actuación es desaprobada de manera casi unánime por los peruanos, según diversas encuestas.
Al respecto, la mesa directiva del Congreso consideró que las manifestaciones «deben ser un espacio de reclamo pacífico» y expresó su «solidaridad y firme respaldo» a la actuación de la Policía, «cuyos agentes han sido víctimas de ataques violentos perpetrados por delincuentes infiltrados en la marcha ciudadana», según aseguró el texto.
Finalmente, sostuvo que Perú «necesita reencontrarse en el respeto, la empatía y el diálogo» y concluyó que «ninguna causa justifica la violencia ni la pérdida de vidas humanas».
El comunicado fue suscrito por el primer vicepresidente del Congreso, el fujimorista Fernando Rospigliosi, y por el segundo y tercer vicepresidentes, el izquierdista Waldemar Cerrón y el derechista Ilich López, respectivamente.
La investigación del caso
La Fiscalía de Perú anunció este jueves que realiza investigaciones urgentes, «en el contexto de graves violaciones a los derechos humanos», por la muerte del manifestante durante la multitudinaria protesta.
El Ministerio Público confirmó que Ruiz «recibió un disparo por arma de fuego en las inmediaciones de la plaza Francia, ubicada en el Cercado de Lima, durante las protestas sociales realizadas el 15 de octubre».
El manifestantes falleció cuando estaba finalizando la multitudinaria protesta del miércoles, según confirmó en un primer momento la Defensoría del Pueblo, que también reportó que los enfrentamientos dejaron más de cien heridos, entre ellos 78 policías y 24 manifestantes, así como diez detenidos.
Al respecto, el director general de operaciones en Salud del Ministerio de Salud (Minsa), Carlos León, declaró este jueves que la mayoría de los civiles heridos fueron atendidos en hospitales de Lima por contusiones, golpes y el efecto de los gases lacrimógenos.
Agregó que dos manifestantes debieron ser operados, aunque dijo que no se tiene «la precisión en este momento» de si fueron heridos por balas, pero sí dijo que «hay personas impactadas por perdigones».
La posición del Gobierno
Tras confirmarse la información sobre la muerte de Ruiz, el presidente de transición de Perú, José Jerí, deseó «que las investigaciones determinen con objetividad los hechos y responsabilidades» y envió «fuerza a su familia en este momento».
Por su parte, el ministro del Interior, Vicente Tiburcio, indicó que dispuso «de forma inmediata que se realicen las investigaciones» al argumentar que no había policías de civil en la zona, tal como han denunciado diversos testigos de la muerte del manifestante.
Tiburcio es parte del Gobierno de transición nombrado el martes último por Jerí, un legislador derechista que asumió la Presidencia el viernes pasado en reemplazo de Dina Boluarte, después de que esta fuera destituida por el Congreso bajo la acusación de «permanente incapacidad moral» para afrontar la crisis de inseguridad en Perú.
EFE