La 74 edición del Festival de Cannes, que comienza el martes 6 de julio, renueva las caras del cine latino y en español. Junto a cineastas veteranos como el brasileño Karim Aïnouz, el certamen abre la puerta a óperas primas como «Libertad», de la española Clara Roquet.
En su última celebración presencial, en 2019, Aïnouz se fue triunfante de la sección oficial Una Cierta Mirada gracias a «A vida invisível de Eurídice Gusmão».
Esta vez, dentro de las Sesiones Especiales, será su cuarta vez en Cannes, donde en 2002 proyectó también en Una Cierta Mirada «Madame Satã», su primer filme, y «O Abismo Prateado» (2011) en la paralela Quincena de Realizadores.
«Libertad», una historia de amistad adolescente y de choque de clases sociales que se proyectará en la sección paralela Semana de la Crítica, es para Roquet su estreno en el largometraje, tras haber participado en los guiones de películas como «10.000 km», de Carlos Marqués-Marcet, o «Petra», de Jaime Rosales.
En la competición oficial, la que entregará la Palma de Oro que suceda a «Parásitos», del surcoreano Bong Joon-Ho, se alza como representante latinoamericana la colombiana «Memoria», dirigida por el tailandés Apichatpong Weerasethakul.
Brasil estará presente en dos de los diez cortometrajes que optan al máximo galardón, en cuyo jurado participa el español Carlos Muguiro: «Sideral», de Carlos Segundo, y «Céu de agosto», de la también brasileña Jasmin Tenucci.
Y España destaca entre los proyectos elegidos en la sección de Clásicos con «Buñuel, un cineasta surrealista», dirigido por Javier Espada, y con una copia restaurada de la película «El camino», de la pionera de la cinematografía nacional Ana Mariscal.
La pincelada latinoamericana o española sigue siendo variada en el resto de secciones oficiales o paralelas.
Una Cierta Mirada, que ha puesto el foco en los nuevos creadores, será el escenario donde se proyecten «Noche de fuego», primera película de ficción de la mexicana-salvadoreña Tatiana Huezo; y «La Civil», ópera prima de la rumana Teodora Mihai, coproducida por el cineasta mexicano Michel Franco.
En las Sesiones Especiales estará además la chilena Dominga Sotomayor con «The years of the everlasting storm», una obra coral firmada por siete directores, entre ellos el iraní Jafar Panahi o de nuevo Weerasethakul.
Y a Cannes Premières, un nuevo apartado dedicado a grandes nombres de la industria, llegará con «Vortex» el «enfant terrible» por excelencia del festival, el francoargentino Gaspar Noé, cuyos filmes de fuerte y explícita carga sexual siempre han revolucionado la Croisette.
Esta 74 edición podría servir igualmente de estreno para futuros grandes nombres del sector.
La Cinefundación, sección del festival dedicada a las escuelas cinematográficas, ha elegido entre sus 17 proyectos el corto español «La caída del vencejo», de Gonzalo Quincoces; el argentino «Billy Boy», de Sacha Amaral; y el brasileño «Cantareira», de Rodrigo Ribeyro.
El Farandi