Los empresarios de Bolivia advirtieron que el incremento del 5,58% al salario mínimo y 3% al haber básico, que el Gobierno de Luis Arce anunció este martes junto al principal sindicato de trabajadores del país, tendrá «consecuencias muy graves» en la mayoría de las empresas.
La disposición, que se tomó sin la parte patronal, eleva el sueldo mínimo a 2.500 bolivianos (362 dólares) y se aplica a los trabajadores del sector público y privado retroactivamente a enero.
En un comunicado, la Confederación de Empresarios Privados de Bolivia (CEPB) dijo que los porcentajes de incremento están «muy por encima» de la inflación que hubo en 2023, del 2,12%, y que «no guardan relación» con el crecimiento previsto para este año.
La entidad empresarial señaló que la medida salarial «no solo tendrá efectos negativos sobre las empresas, sino que profundizará la precarización del empleo y afectará la inversión pública subnacional y la economía en general».
«Lamentamos que una vez más, como sucedió en los últimos años, se haya excluido al sector privado del análisis de los efectos que puede tener un incremento salarial desproporcionado sobre los costos que asumen las empresas», enfatizó la patronal.
EFE.