La inflación en Argentina fue en septiembre pasado del 2,1 %, la tasa de variación mensual más alta desde abril último, una aceleración en los precios que se explica por factores estacionales y, en menor medida, por el impacto de las tensiones cambiarias que se suceden desde agosto.
Según informó este martes el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), el índice de precios al consumidor se situó en septiembre en el 31,8 % interanual, su decimoséptima desaceleración consecutiva y la tasa más baja desde julio de 2018.
En el noveno mes de 2025, los precios al consumidor crecieron el 2,1 % en comparación con agosto, mes en el que la tasa de variación mensual había sido del 1,9 %.
La inflación argentina acumuló en los nueve primeros meses del año un alza del 22 %, según el informe del Indec.
De acuerdo a los datos oficiales, los precios de los bienes tuvieron el mes pasado una variación positiva del 2 % en comparación con agosto, mientras que los servicios subieron el 2,3 %, unos datos que ascienden al 24,6 % y el 49,2 %, respectivamente, en la comparación interanual.
Entre las subidas mensuales registradas en septiembre destacan las de gastos de Vivienda (3,1 %), educación (3,1 %), transporte (3 %) e indumentaria (2,1 %), esta última un alza ligada al cambio de temporada.
Los precios de los alimentos y bebidas no alcohólicas aumentaron el 1,9 % con respecto a agosto, con fuertes aumentos en frutas y verduras que no son de esta estación.
«La aceleración se explicó por la suba de Estacionales (2,2 % mensual) después de la baja de agosto», apuntó la consultora LCG en un informe.
EFE.