El indicador, que sigue los cambios mensuales de los precios internacionales de un conjunto de productos alimenticios, se situó en 120,7 puntos en agosto, «lo que supone un leve descenso respecto a la cifra revisada de julio», que era de 120,8%, señaló la FAO en un comunicado.
Este modesto descenso se debe a la disminución de las cotizaciones del azúcar, la carne y los cereales que contrarrestó los aumentos correspondientes a los aceites vegetales y los productos lácteos.
El precio de los cereales disminuyó un 0,5% respecto a julio, al descender las exportaciones de trigo por el mar Negro y al aumentar más de lo previsto en Argentina y Estados Unidos.
En lo que concierne al precio del arroz, aumentó un 0,6 % en agosto y los aceites vegetales también se encarecieron un 0,8% respecto a julio, alcanzando el nivel máximo en los últimos 20 meses debido al «aumento de los precios internacionales del aceite de palma que contrarrestó la disminución de las cotizaciones de los aceites de soja, girasol y colza».
El precio del azúcar bajó un 4,7% hasta situarse en el nivel más bajo desde octubre de 2022 gracias a la mejora de las perspectivas de producción para las próximas cosechas de caña de azúcar en la India y Tailandia.
La carne también bajó de precio, un 0,7%, mientras que los productos lácteos aumentaron un 2,2%.
EFE