El Gobierno de Australia ha decidido inyectar 189 mil millones de dólares australianos (101 mil millones de euros o 109 mil millones de dólares) a la economía para amortiguar el impacto de la crisis del coronavirus, anunció este sábado el primer ministro australiano, Scott Morrison.
"Queremos ayudar a los negocios a seguir funcionando de la mejor manera que les sea posible y durante el tiempo que puedan, o pausar sus actividades en lugar de cerrar. Queremos asegurar que cuando esta crisis haya pasado, las empresas australianas puedan volver a ponerse en marcha", explicó Morrison en su comunicado.
El monto total de la inyección supone el 9,7 por ciento del PIB australiano, según el ministro del tesoro, Josh Frydenberg.
La inyección incluye 90 mil millones de AUS$ (48,4 mil millones de euros o 52 mil millones de US$) del Banco Central de Australia (RBA), 15 mil millones de AUS$ (8 mil millones de euros 8,7 mil millones de US$) del Gobierno para facilitar el acceso a servicios financieros y 66,1 mil millones de AUS$ (35,6 mil millones de euros o 38,2 mil millones de US$) de ayuda económica directa.
Este último paquete de 66,1 mil millones de AUS$ incluye ayudas a las familias, trabajadores autónomos, jubilados, personas que perciben prestaciones sociales; ayudas para que las empresas puedan mantener a sus empleados y soporte financiero para que las empresas no sea vean obligadas a cerrar.
Entretanto, el gobierno del estado australiano de Nueva Gales del Sur, el territorio con más casos detectados de COVID-19, anunció que se prepara para imponer el cierre de todos los servicios no esenciales en las próximas 48 horas para frenar el avance de la pandemia.
Hasta el momento se ha detectado un total de 1.071 casos de coronavirus en Australia, 436 de ellos en Nueva Gales del Sur, donde han fallecido seis infectados, de un total de 7 muertos en todo el país.
Información de EFE