El Gobierno argentino dio el primer paso oficial para recuperar la sostenibilidad de su deuda soberana al autorizar al Ministerio de Economía a reestructurar bonos emitidos bajo ley extranjera por 68.842 millones de dólares (60.492 millones de euros).
El presidente, Alberto Fernández estableció en un decreto publicado en el Boletín Oficial que el monto nominal máximo de las operaciones de administración de pasivos, canjes y/o reestructuraciones será de 68.842.528.826 dólares o su equivalente en otras monedas.
El programa abarca títulos públicos de la República Argentina emitidos bajo ley extranjera existentes al 12 de febrero pasado, según precisa la norma, que establece que "las prórrogas de jurisdicción sean en favor de los tribunales estaduales y federales ubicados en las ciudades de Nueva York (Estados Unidos), Londres (Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda del Norte), y de los tribunales ubicados en la ciudad de Tokio (Japón)".
-Plan para restaurar la sostenibilidad de la deuda pública
El decreto sostiene que "a efectos de resolver la situación de inconsistencia macroeconómica, resulta fundamental implementar políticas de deuda como parte de un programa integral diseñado con el objetivo de recuperar un crecimiento sostenible de la economía y restaurar la sostenibilidad de la deuda pública".
El Gobierno decidió avanzar con la reestructuración "atendiendo a la situación actual de insostenibilidad de la deuda pública" y de acuerdo a lo establecido en la Ley de Solidaridad Social y Reactivación Productiva que impulsó Fernández a poco de asumir el pasado 10 de diciembre, señala la norma.
El plan de reestructuración anunciado en el Boletín Oficial no incluye el préstamo de 44.000 millones de dólares (38.659 millones de euros) otorgado por el Fondo Monetario Internacional (FMI) al anterior Gobierno de Mauricio Macri (2015-2019), cuando estalló la crisis que aún continúa.
El cronograma oficial prevé en tanto que en esta segunda semana de marzo el Gobierno presente la oferta de reestructuración que elabora el Ministerio de Economía, bajo estricto hermetismo, para restaurar la "sostenibilidad" de la deuda y poder afrontar así su pago sin agravar la recesión que arrastra la economía argentina desde inicios de 2018.
El Palacio de Hacienda no precisó si podría modificar el calendario tras el "lunes negro" que vivieron los mercados internacionales y a la espera de un mejor clima financiero.
-Deuda Pública en alza
Según cifras de la Secretaría de Finanzas, a finales de diciembre pasado la deuda bruta de Argentina ascendía a 323.177 millones de dólares (284.002 millones de euros), el 44 % emitido bajo legislación extranjera, mientras que en 2015 era de 240.000 millones de dólares (210.907 millones de euros), según el anterior Ejecutivo.
La deuda en títulos públicos de mediano y largo plazo suma unos 194.000 millones de dólares (170.473 millones de euros), un 80 % en moneda extranjera, al tiempo que la concentración de vencimientos en el corto plazo genera alerta en el Gobierno, porque deberá afrontar compromisos de capital por 48.968 millones de dólares (43.048 millones de euros) y de intereses por 14.838 millones (13.044 millones de euros).
-Antecedestes de Argentina
Este será el segundo proceso de reestructuración de deuda que encarará Alberto Fernández, luego del proceso de renegociación que se realizó cuando se desempeñó como jefe de Gabinete durante el Gobierno de Néstor Kirchner (2003-2007).
En medio de una profunda crisis, Argentina entró en cese de pagos a finales de 2001, por deudas por 102.000 millones de dólares, la mayor de la historia hasta ese momento.
El país sudamericano recién logró reestructurar la deuda en "default" en 2005, cuando logró una adhesión del 76,15 % para una oferta de canje de bonos en mora que implicaba una quita nominal del 65,4 %.
El canje fue reabierto en 2010, durante el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner (2077-2015), hoy vicepresidenta, y Argentina logró así elevar el nivel de adhesión al 92,4 %.
Información de EFE