El Gobierno húngaro aseguró este miércoles que no puede aprobar la última propuesta de sanciones de la Unión Europea contra Rusia ya que «hundiría» la seguridad energética del país centroeuropeo, muy dependiente de los hidrocarburos rusos.
«El Gobierno, en esta forma, no puede aprobar responsablemente el nuevo paquete» de sanciones, afirmó el ministro de Exteriores, Péter Szijjártó, a medios húngaros desde Uzbekistán, donde se encuentra de visita oficial.
A pesar de que el ministro reconoció que Hungría obtendría, junto a Eslovaquia, un año y medio de transición hasta eliminar las importaciones del petróleo ruso, argumentó que se trata de «poco tiempo».
Szijjártó reiteró que el abastecimiento energético de Hungría «actualmente es estable» y que el sexto paquete de sanciones contra Rusia lo «hundiría del todo».
Hungría importa de Rusia el 60 % del petróleo y el 85 % del gas que usa. Esta sería la primera vez que Hungría no apoya un paquete de sanciones contra Rusia por la invasión de Ucrania.
La Comisión Europea propone conceder a Hungría y Eslovaquia un año más que al resto, hasta el 31 de diciembre de 2023, para renunciar a las importaciones de petróleo ruso, según consta en su propuesta para el sexto paquete de sanciones a Moscú, a la que ha tenido acceso Efe.
La propuesta de la CE dice que el periodo de retirada más amplio para estos dos países se debe a su «situación geográfica», pues no tienen salida al mar, así como a su elevada dependencia del crudo ruso.
Szijjártó aseguró que Hungría sólo podría aceptar el nuevo paquete de sanciones si el transporte de petróleo por oleoductos quedara fuera de las restricciones.
EFE