La anestesia está compuesta por 5 preceptos como son: la analgesia (disminución o abolición de la percepción de los estímulos dolorosos), la ansiólisis (disminución de la ansiedad), la hipnosis (pérdida de la voluntad gracias a un estado de inconciencia), la amnesia anterógrada temporal (pérdida reversible momentánea de la memoria) y la relajación neuromuscular.
Provoca la ausencia temporal de la sensibilidad de una parte del cuerpo o de su totalidad, producto de la administración de drogas de forma controlada y dosificadas, según las condiciones particulares de cada paciente y del acto quirúrgico.
Con los avances en la medicina presentan muy bajo riesgo de complicaciones, siempre hay que individualizar a los pacientes y contemplar el riesgo del procedimiento quirúrgico. Antes de la intervención, el anestesiólogo estudiará los posibles riesgos del paciente para así, considerar las implicaciones del acto quirúrgico y el procediendo anestésico. Sin duda, existirá mayor riesgo en los pacientes que presenten patologías agregadas en contraposición a pacientes sin ninguna patología.
El experto Obed Jaimes considera que las técnicas anestésicas actualmente son muy seguras y minimizan la probabilidad de experiencia quirúrgica traumática o desagradable para el paciente.
“En la práctica de la anestesia general actual, se emplean drogas ya sean intravenosas o inhaladas con un alto perfil de bioseguridad. Muchas tienen una duración muy corta en el cuerpo, y otras se limitan por el uso de otros compuestos para contrarrestar su efecto.
La anestesia regional viene a ser la interrupción temporal y reversible de los impulsos dolorosos provenientes de uno o más plexos nerviosos, pudiendo de igual forma haber interrupción de la inervación muscular de forma temporal y reversible de dichas ramificaciones.
“Esto gracias a técnicas intervencionistas que abarcan desde la simple referencia anatómica, como también la utilización de neuroestimuladores o procedimientos eco guiados, a fin de ofrecer el menor perjuicio posible, minimizando los riesgos, sin que implique la acción de los anestésicos en el encéfalo a diferencia de la anestesia general. Los pacientes permanecen con consciencia, pero no tienen sensaciones dolorosas en la parte del cuerpo intervenida. En este proceso, se utilizan anestésicos locales; con combinaciones de opiáceos y también se pueden agregar coadyuvantes”, dijo.