La obesidad es una de las enfermedades más peligrosas que afecta a los seres humanos, según indica la Organización Mundial de la Salud (OMS) , ya que se trata de una acumulación anormal o excesiva de grasa.
Las personas con obesidad tienen más riesgo de sufrir enfermedades crónicas como las cardiovasculares, diabetes y algunos tiempos de cáncer, además de los efectos psicológicos que esta produce.
En algunas culturas, quienes sufren de obesidad son estigmatizados por la creencia de dicho padecimiento es su responsabilidad, pero lo cierto es que esto tiene bases como la biología y el riesgo genético de cada persona, la influencia del medio ambiente, dificultad para acceder a la atención médica, además del fácil acceso a alimentos ultraprocesados, es decir, chips, aperitivos, tortas, helados, pan industrial, galletas, salchichas, refrescos, etc.
Esta enfermedad también puede ser consecuencia de problemas psicológicos emergentes durante el desarrollo de una persona en su edad temprana, que, a su vez, se multiplican cuando existen los señalamientos por el aumento de peso.
Para combatir esta enfermedad es indispensable cuidar a los más pequeños de la casa, ya que, según datos de la OMS, la obesidad infantil se ha duplicado ascendiendodo su bienestar social, desarrollo emocional, su autoestima y como resultado final su bajo rendimiento académico.
La clave está en la prevención, debemos aprender a comer completo y saludable, hacer ejercicios y adicionalmente, tener un seguimiento psicológico.
Con información de vtv