Un estudio publicado en la revista European Respiratory Journal, concluyó que el uso de mascarilla no tiene un efecto sobre la capacidad de las personas de hacer rutinas de ejercicio con alta intensidad.
Durante este análisis, se evaluaron a 12 personas que hacían ejercicio con y sin cubrebocas, con lo que encontraron que su uso no representa ninguna afectación para la salud o para la efectividad del ejercicio, e incluso ayuda reducir la posibilidad de transmisión del Covid-19.
«Sabemos que la principal vía de transmisión del coronavirus es a través de las gotitas en el aliento y es posible que respirar más fuerte durante el ejercicio pueda facilitar la transmisión, especialmente en interiores. Las investigaciones sugieren que usar una máscara puede ayudar a prevenir la propagación de la enfermedad», aseguran los expertos.
A pesar de que no afecta negativamente, los investigadores encontraron que al usar mascarilla se puede presentar una disminución muy pequeña en la capacidad de realizar ejercicio, en especial aeróbicos, pero aseguran que la reducción es modesta e insignificante.
Para los investigadores esto podría ayudar a que más gimnasios pueden abrir, aun sin importar que no sean al aire libre.
Este estudio animo a los expertos a analizar el uso de cubrebocas y sus afectaciones en actividades cotidianas como subir escaleras o hacer tareas del hogar, ya que las masacrillas juegan un papel muy importante y es necesario acostumbrarse a ellas.