El Defensor por los Derechos Humanos, Rafael Narváez, le salió al paso al nuevo deporte nacional Motopiruetas porque coloca en riesgo de vida a los conductores de las motocicletas, su acompañante, vehículos y transeúntes con consecuencias.
La ley de Transporte Terrestre prohíbe la práctica de las Motopiruetas en la vía pública con multas de 6.500 unidades tributarias a quien infrinja la norma, en el numeral 2 del art 179 de la ley de Transporte Terrestre, establece que aquellos conductores con licencia de 1.º grado, 2.º grado y tercer grado que pongan en peligro la seguridad del tránsito serán sancionados con revocación de licencia y procedimientos administrativos.
El derecho a la vida es un derecho humano universal con obligación del Estado a preservarla, por lo que Narváez manifiesta su desacuerdo que haya sido declarado como deporte nacional, por lo que solicita sea revocada está decisión para evitar consecuencias que lamentar en la población y promover la seguridad personal y la vida sin peligro.
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