El gobernador de Anzoátegui, Luis José Marcano, informó que unas cuatro mil personas resultaron afectadas tras la crecida del río Unare.
Detalló que el 10% de las 7 mil viviendas ubicadas en las localidades de Clarines y Onoto sufrieron inundaciones, lo que obligó a estas cuatro mil personas a desplazarse y alojarse en residencias de sus familiares o amigos.
Indicó que unas 300 personas están siendo atendidas en refugios recibiendo atención social.
El gobernador reiteró que el peaje de Unare hacia Clarines por la troncal 9 continúa cerrado hasta tanto no bajen las aguas, se instaló un puesto de comando cívico-militar policial para fortalecer la coordinación de las acciones de atención.
Noticiero Venevisión