El estado brasileño de Amazonas anunció este sábado que impondrá un toque de queda de 24 horas diarias por una semana a partir del lunes para intentar reducir la transmisión del coronavirus SARS-CoV-2 y hacer frente a la grave crisis sanitaria que Manaos, su capital, enfrenta desde hace dos semanas.
Los dos millones de habitantes de Manaos y los de los demás municipios de Amazonas acatan desde hace poco más de una semana un toque de queda de once horas diarias, entre las 19.00 horas y las 6.00 del día siguiente, que será ampliado a las 24 horas a partir del próximo lunes y por un período de siete días.
El gobernador de Amazonas, Wilson Lima, explicó en una rueda de prensa que la próxima semana tan sólo podrán salir a las calles los trabajadores de los sectores esenciales, como la salud y la seguridad, así como, durante el día, las personas que tengan que acudir a supermercados o farmacias.
«Impondremos una restricción para la circulación de las personas de 24 horas. Eso no significa cercenar el derecho de ir y venir. Los ciudadanos podrán salir en casos de extrema necesidad, como ir al supermercado, pero tan sólo una persona por familia», dijo.
Los supermercados, panaderías y comercios de alimentos tan sólo podrán abrir sus puertas entre las 6.00 horas y las 19.00 horas y los restaurantes tan sólo podrán atender peticiones a domicilio.
«No hay necesidad de correría a los supermercados ni de almacenar alimentos. Es necesario tener prudencia y que las personas entiendan que estas medidas son duras pero necesarios para salvar la mayor cantidad de vidas», afirmó el gobernador.
Lima aseguró que el objetivo de la medida es evitar aglomeraciones con el fin de reducir la transmisión del SARS-CoV-2 y hacer frente al colapso que sufre Manaos por la falta de camas en los hospitales para los pacientes con coronavirus y de oxígeno para quienes están conectados a respiradores mecánicos.
EFE