Los talibanes negaron este sábado que fallecieran 19 personas en el atentado el viernes en un estadio de críquet en Kabul, como informó la ONU, y rebajaron el número de fallecidos a dos, mientras que fuentes deportivas y una ONG italiana de salud cifraron las víctimas en cuatro y en 13 heridos, respectivamente.
«Rechazamos los informes de 19 muertos por la explosión en el Estadio Internacional de Críquet, lo rechazamos de manera enérgica. Son incorrectos y quienes los dieron están alejados de los hechos», afirmó a Efe el portavoz del Ministerio del Interior del Gobierno de los talibanes, Abdul Nafi Tekor, sin aportar una cifra alternativa.
El portavoz de la Policía de Kabul, Khalid Zadran, reveló que la explosión se debió al lanzamiento de una granada contra el público que asistía a un partido de la liga de críquet, y anotó que en el atentado «algunos compatriotas resultaron heridos y otras dos personas murieron», mientras intentan arrestar a los culpables.
Este número oficial de víctimas un día después del ataque contrasta con las cifras aportadas en Twitter por el secretario general de la ONU, António Guterres, que aseguró que la explosión «se cobró la vida de al menos 19 civiles» y dejó varios heridos.
«Los ataques contra civiles y bienes de carácter civil están estrictamente prohibidos por el derecho internacional humanitario», aseguró Guterres tras condenar «enérgicamente» el atentado.
El representante especial adjunto del secretario general de la ONU y Coordinador Humanitario para Afganistán, Ramiz Alakbarov, se encontraba en el estadio cuando a primera hora de la tarde de ayer se produjo la explosión y reclamó «una investigación transparente» para que los causantes del atentado sean llevados ante la justicia.
Con información de EFE.