La Organización de Estados Americanos (OEA) anunció este miércoles que enviará una misión de observación electoral a los comicios generales en Bolivia, previstos para el próximo 18 de octubre.
El organismo, con sede en Washington, explicó en un comunicado que la misión, encabezada por el excanciller de Costa Rica Manuel González, estará compuesta por más de 30 expertos que se desplegarán en ciudades como La Paz, Santa Cruz y Cochabamba, además de “dar seguimiento al voto en el exterior en Argentina, España y Estados Unidos”.
Según la OEA, el “grupo base” de la misión llegará a Bolivia en los días previos a las elecciones y, durante su estancia, “se reunirá con autoridades electorales, representantes del Gobierno, partidos políticos, candidatos y representantes de la sociedad civil, siempre con estricta observancia de los protocolos sanitarios, incluyendo la distancia física y el uso de mascarillas”, debido a la pandemia de COVID-19.
Precisamente, por el coronavirus, la misión pondrá en marcha un plan para recopilar información sobre el terreno con “componentes presenciales y virtuales” para poder interactuar con los principales actores en los comicios y analizar todos los aspectos técnicos del proceso.
Evo Morales fue declarado vencedor de las elecciones de octubre de 2019 en Bolivia para un cuarto mandato consecutivo, que luego fueron anuladas entre denuncias de fraude a su favor, que él niega.
El entonces presidente anunció su renuncia en noviembre, denunciando que era forzado por un supuesto golpe de Estado en medio de presiones de mandos policiales y militares, entre otras.
Un informe de la OEA advirtió en aquel momento irregularidades en el proceso, tanto en actas como en el sistema informático de conteo de votos, entre otras, mientras que otros estudios argumentaron luego que los votos a Evo Morales le daban la victoria.
La “manipulación electoral”, según la OEA, se produjo a través de “cambios en las actas y la falsificación de las firmas de jurados de mesas” que fueron detectados por la misión de observación del organismo, así como por la redirección del flujo de datos en el procesamiento de los resultados a “dos servidores ocultos y no controlados” por el personal del Tribunal Supremo Electoral (TSE).
El anterior órgano electoral que gestionó aquellos comicios está procesado, con algunos de sus integrantes en prisión preventiva, acusados de delitos electorales relacionados con ese supuesto fraude.
El Parlamento boliviano, en el que el partido de Evo Morales tiene la mayoría, designó en diciembre a seis nuevos vocales del Tribunal Supremo Electoral, mientras que el séptimo fue nombrado por la presidenta interina de Bolivia, Jeanine Áñez, que tiene esta potestad.
Bolivia prevé celebrar nuevos comicios generales el próximo 18 de octubre.
EFE