El primer ministro italiano, Giuseppe Conte, impuso el martes nuevas restricciones a reuniones, restaurantes, deportes y actividades escolares, en un intento por frenar el reciente aumento de casos en el país con una media de 5.500 contagios diarios por Covid-19.
El decreto del gobierno, publicado después de días de versiones preliminares y especulaciones de los ministros sobre sus probables medidas, entrará en vigencia dentro de 24 horas y tendrá una vigencia de 30 días.
La medida prohíbe reuniones en restaurantes, clubes o al aire libre y recomienda encarecidamente que las personas no celebren fiestas en sus hogares ni reciban a más de seis invitados en ningún momento. A las bodas y otras ceremonias no pueden asistir más de 30 personas.
El decreto advierte firmemente que las mascarillas, que ya son obligatorias en los edificios públicos y al aire libre, también deben usarse en casa cuando haya personas que no pertenezcan al núcleo familiar.
Por otra parte, los restaurantes y bares pueden permanecer abiertos hasta la medianoche para el servicio de mesa, pero no pueden atender a las personas de pie, dentro o fuera de las instalaciones, después de las 21.00 hora local.
Esto tiene como objetivo detener las grandes reuniones nocturnas fuera de los bares a las que se culpa en parte del reciente aumento en el número de infecciones.
Según el decreto, los deportes amateur de contacto como el fútbol están prohibidos a menos que sean organizados por organismos oficialmente reconocidos que se hayan adherido a los protocolos de seguridad de COVID establecidos por las federaciones deportivas nacionales.
En la práctica, esto significa que la mayoría de los equipos amateurs pueden seguir jugando.
Las escuelas permanecerán abiertas, pero las actividades fuera del aula están restringidas, con la prohibición de viajes escolares y visitas de intercambio.
Con Información de Reuters