En Panamá fueron hallados siete cuerpos en estado de descomposición en una fosa ubicada en un lugar remoto de una comarca indígena, donde se denunció la presencia de una supuesta secta que habría secuestrado a un grupo para someterlo a ritos religiosos.
Las autoridades confirmaron que las víctimas son una mujer de 33 años y seis menores de entre uno y 17 años de edad, aunque no han informado cuándo se registraron las muertes ni las causas, ni tampoco si las víctimas son miembros de la misma familia.
Debido a que la fosa está ubicada en medio de una selva húmeda y de difícil, acceso las autoridades fueron guiadas al lugar por los habitantes de la aldea Alto Terrón, quienes denunciaron que los supuestos victimarios serían los pastores de una secta.
El ministerio de Seguridad Pública informó que diez supuestos pastores de esa secta fueron detenidos por fuerzas especiales de la Policía Nacional, y que rescataron a 15 personas, entre ellas, al menos 7 niños.
Redacción Noticiero Venevisión