Alemania dejará en situación de "reserva" hasta abril de 2023 dos de las tres últimas tres centrales atómicas del país, que de acuerdo al calendario del apagón nuclear deberían quedar desconectadas a finales de este año.
Estas son las conclusiones del llamado "test de resistencia" sobre la situación energética del país que presentará el ministro de Economía y Protección del Clima, el verde Robert Habeck, según avanza el semanario "Der Spiegel".
El canciller alemán, Olaf Scholz, había dejado abierta la posibilidad de prolongar la existencia de las tres últimas plantas en función de los resultados de esas pruebas.
La coalición de Gobierno alemán mantiene posiciones divergentes acerca de esa cuestión, ya que mientras los socialdemócratas de Scholz se mostraban partidarios de una prolongación limitada a unos meses, sus socios liberales apostaban por mantenerlos conectados al menos hasta 2024.
Los Verdes rechazan que sea necesario, puesto que proporcionan apenas un 6 % del total del consumo energético, pero una parte del partido ecologista no lo descartaba ya completamente en medio de la inseguridad derivada de la reducción de los suministros de gas ruso.
Alemania ha logrado rebajar su dependencia energética de Rusia desde el inicio de la invasión de Ucrania. Si en febrero un 55 % del total de importaciones de gas procedían de ese país, ahora el porcentaje bajó al 9 %, tras sustituirse por envíos de Noruega y Países Bajos.
Los depósitos de gas se encuentran actualmente en un 85 % de su capacidad, un nivel que esperaba alcanzarse en octubre, mientras que para noviembre se aspira a lograr el 95 %, considerado necesario para garantizar los suministros de todo el invierno.
EFE