Al menos tres muertos, entre ellos dos niños, dejaron las lluvias en el departamento colombiano de Caldas (centro), donde el desbordamiento de un río y una quebrada también dejaron dos lesionados, seis viviendas destruidas, 30 casas averiadas y más de 3.000 familias afectadas.
El director general de la Unidad Nacional Gestión del Riesgo de Desastres (UNGRD), Javier Pava, aseguró que la emergencia sucedió en los municipios de Riosucio y Supía.
«Luego de las acciones de respuesta, vienen las discusiones sobre las soluciones de fondo, ya que hay unas viviendas que están en zonas de alto riesgo y las familias que habitan allí deben ser reubicadas de manera urgente por parte de las autoridades territoriales», señaló.
Agregó que «el mapa de amenazas con el que cuenta el municipio se debe actualizar con base a lo que dejó el paso del río tras esta emergencia, eso va a permitir que podamos prevenir otras situaciones de desastres».
EFE