Edgar Ramírez y Jennifer Garner visitaron a niños migrantes en EEUU

La actriz y ex esposa de Ben Affleck, Jennifer Garner está en un refugio de migrantes en la frontera entre Estados Unidos y México con su amigo Édgar Ramírez.

El martes, la actriz publicó imágenes de su reciente visita a Casa Alitas en Tucson, Arizona, con un video en Instagram.

Los protagonistas de Yes Day se reunieron con las familias que se alojan en el refugio para migrantes y recorrieron las instalaciones en colaboración con Save the Children..

En el clip de dos minutos, Garner, de 49 años, explicó que ella y Ramírez, de 44 años, iban a servir fruta a las familias que acababan de llegar al refugio.

Después, la madre de tres hijos jugó con animales de peluche compartió tiernos momentos con los niños, todo desde una distancia social segura y repartió sopa, mientras Ramírez leía un libro a los niños en español.

Garner, que lleva mucho tiempo siendo embajadora de la organización, examinó los kits de actividades para niños de todas las edades de Save the Children, y comentó: «Siempre me sorprende, están hechos con mucho amor».

A continuación, Garner vio la ropa y el material de maternidad donados. Por último, los actores presentaron sus respetos en los monumentos conmemorativos en honor a dos fallecidos en el camino del desierto de los emigrantes.

Garner también elogió la labor de Casa Alitas, así como la misión de Save the Children destinada a ayudar a los más necesitados.

Al comentar la crisis más amplia en la frontera, Garner instó a los fans a pensar en los niños y las familias necesitadas.

«Este es un tema espinoso y politizado, pero con los bebés y los niños en el centro, depende de nosotros seguir trabajando juntos para encontrar soluciones», concluyó. Y añadió a su coprotagonista, que es venezolano: «Gracias, Edgar, por sumar tu corazón a nuestro viaje. Y gracias a todos en Tucson, AZ, por tomarse el tiempo de contarnos sus historias».

La actriz resumió en 5 puntos su visita al refugio:

La semana pasada, mi maravilloso amigo @ edgarramirez25 y yo visitamos Casa Alitas, un refugio para familias migrantes, y uno de los 35 socios de @ savethechildren a lo largo de la frontera sur de los Estados Unidos. Las conclusiones:

1. Edgar lo dice mejor: nadie quiere salir de casa. Los niños y las familias están llegando a la frontera entre Estados Unidos y México, después de haber huido de una violencia y desastres inimaginables en sus países de origen.

2. La migración climática no es un problema del futuro, está sucediendo ahora. Save the Children advierte sobre varios países que se espera que pasen de la sequía a la hambruna el próximo año.

3. Nos reunimos con oficiales de la Patrulla Fronteriza y trabajadores de ayuda humanitaria; ellos están trabajando en diferentes lados del mismo problema. Es importante notar que tienen el mismo mensaje: necesitamos una reforma migratoria. La última legislación sobre inmigración fue aprobada por George W. Bush. Pasar de un conjunto de órdenes presidenciales a otro es caro y desestabilizador.

4. Con refugios como @casaalitastucson, Save the Children está cumpliendo nuestra misión de ayudar a los niños más vulnerables del mundo.

5. La gente es buena. Junto con las personas increíbles que dan la bienvenida a los viajeros cansados a Casa Alitas, conocimos organizaciones que ofrecen servicios legales, médicos que ofrecen atención médica voluntaria y pasamos tiempo con los samaritanos Green Valley-Sahuarita, quienes nos llevaron a Edgar y a mí a cruces que marcan los cuerpos que se encuentran a lo largo de camino del desierto, en este caso un joven que había muerto de deshidratación y, no muy lejos, una cruz en honor al cuerpo recuperado de un bebé que nació muerto. La ceremonia de los samaritanos termina con «Presente», reconociendo el espíritu del viajero y nuestra conexión con ellos.

6. Este es un tema espinoso y politizado, pero con los bebés y los niños en el centro, depende de nosotros seguir trabajando juntos para encontrar soluciones. Gracias, Edgar, por agregar tu corazón a nuestro viaje. Y gracias a todos en Tucson, AZ, por tomarse el tiempo para contarnos sus historias.

Con información de Diario mx