El gobierno ruso cree que evaluar el impacto del coronavirus en el mercado petrolero llevará tiempo, por lo que no ha formulado aún su posición con respecto a los posibles pasos a dar en respuesta a la caída del consumo que se ha producido a raíz del brote y la desaceleración de la demanda en China.
"Ahora no puedo decir a qué estamos dispuestos y a qué no sin entender completamente la situación y sin pronósticos claros sobre el desarrollo de la situación con el coronavirus", dijo el ministro de Energía, Alexander Novak, de acuerdo con la agencia Interfax.
"Para ello se necesita cierto tiempo, a fin de ver cómo se va desarrollar la situación y qué influencia va a tener en los mercados mundiales, en el petróleo", añadió al ser preguntado si Rusia apoya en el comité técnico de países de la OPEP y de sus aliados (OPEP+) que se celebra en Viena recortar aún más la producción o si por contra aboga por extender el acuerdo actual.
En diciembre los diez socios de la OPEP y otros trece aliados, encabezados por Rusia, acordaron en Viena -en su última reunión ministerial- profundizar, de 1,2 a 1,7 mbd, un recorte del bombeo durante el primer trimestre de 2020 para mantener los precios.
"El comité continúa trabajando en Viena. Nuestros especialistas están allí, vigilan la situación y discuten varias opciones".
De acuerdo con la agencia oficialista TASS, los expertos del comité técnico recomendaron reducir aún más la producción -en 600.000 barriles por día- para neutralizar el efecto del coronavirus en el mercado petrolero.
EFE